2. EMDR. una terapia eficaz para el trauma

EMDR: una terapia eficaz para el trauma

¿Por qué hay recuerdos que, aunque haya pasado el tiempo, siguen apareciendo con fuerza y nos hacen revivir el mismo miedo o dolor del pasado? ¿Por qué ciertas experiencias dejan una huella tan profunda que condicionan nuestra forma de pensar, sentir y relacionarnos?

El trauma no desaparece por sí solo: se queda registrado en la memoria como si fuese una herida que no termina de cicatrizar. El EMDR (Eye Movement Desensitization and Reprocessing) es una de las terapias más reconocidas en el mundo para ayudar a reprocesar esas experiencias y liberarse de su impacto.

En este artículo veremos qué es el EMDR, cómo funciona, qué traumas trata, cuáles son sus beneficios y por qué es considerado un enfoque seguro y eficaz para tratar el trauma.

¿Qué es la terapia EMDR?

El EMDR significa Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares. Fue desarrollado a finales de los años 80 por Francine Shapiro, psicóloga estadounidense, y desde entonces ha acumulado un amplio respaldo científico y clínico.

El objetivo principal del EMDR es ayudar al cerebro a procesar recuerdos traumáticos que quedaron “bloqueados”. Cuando vivimos una situación muy dolorosa o impactante, nuestro sistema nervioso puede quedarse atascado en ese recuerdo, como si lo reviviera una y otra vez.

El EMDR no borra lo que ocurrió, pero permite que esos recuerdos se integren de una forma más saludable. La persona puede seguir recordando lo que pasó, pero sin la misma intensidad emocional ni la sensación de estar reviviendo el trauma.

¿Cómo funciona el EMDR en la práctica?

La base del EMDR es lo que se conoce como modelo de Procesamiento Adaptativo de la Información. Según este modelo, nuestro cerebro está diseñado para procesar y digerir experiencias. Pero cuando algo es demasiado intenso o doloroso, ese proceso se bloquea. El recuerdo queda congelado, con las mismas emociones y sensaciones que en el momento original.

El EMDR facilita que ese procesamiento se reactive. Para ello se utiliza la estimulación bilateral, que puede consistir en:

  • Movimientos oculares guiados (siguiendo el dedo del terapeuta de un lado a otro).
  • Estímulos auditivos alternados (sonidos que se presentan en un oído y luego en el otro).
  • Estímulos táctiles (toques suaves en las manos o rodillas, de manera alterna).

Mientras la persona se concentra en el recuerdo traumático y en las emociones que lo acompañan, el terapeuta introduce la estimulación bilateral. Esto activa la capacidad natural del cerebro para reorganizar la información y reducir el malestar.

Veámoslo claro con un ejemplo: alguien que sobrevivió a un accidente de tráfico puede revivirlo cada vez que escucha un frenazo. Tras varias sesiones de EMDR, ese recuerdo deja de generar pánico. La persona puede recordarlo, pero sin la misma carga de ansiedad, como si la herida emocional hubiera cicatrizado.

¿Qué tipo de traumas se pueden tratar con EMDR?

El EMDR es especialmente eficaz en el tratamiento del trauma, pero conviene aclarar que no hablamos solo de experiencias extremas.

  • Trauma con “T” mayúscula: situaciones de gran impacto, como abusos, violencia, accidentes graves, catástrofes naturales o experiencias en la guerra.
  • Trauma con “t” minúscula: experiencias más cotidianas, pero igualmente dolorosas, que se repiten o marcan profundamente: humillaciones, rechazos, burlas, negligencia emocional o duelos no resueltos.

Ambos tipos de trauma pueden dejar huellas emocionales duraderas. El EMDR se aplica en casos como:

  • Estrés postraumático.
  • Ansiedad generalizada o ataques de pánico.
  • Fobias específicas.
  • Duelos complicados.
  • Problemas de autoestima.
  • Dolor crónico relacionado con experiencias traumáticas.

¿Qué beneficios tiene la terapia EMDR?

El EMDR no es solo una técnica, sino un enfoque terapéutico completo que ha mostrado múltiples beneficios:

  • Reducción del malestar ligado a recuerdos dolorosos. Situaciones que antes provocaban ansiedad, miedo o vergüenza intensa se recuerdan con mayor distancia emocional.
  • Mayor regulación emocional. La persona aprende a reconocer y manejar mejor sus reacciones ante desencadenantes (triggers) que activan una reacción emocional desbordante.
  • Sensación de seguridad. Al reprocesar los recuerdos, se reduce la sensación constante de amenaza.

maginate este ejemplo: una persona que sufrió burlas constantes en la infancia, un caso de bullying, puede llegar a la adultez con una autoestima muy frágil. Tras un proceso con EMDR, esos recuerdos pierden fuerza, y la persona empieza a sentirse más segura al relacionarse, sin cargar con la vergüenza del pasado.

¿Es el EMDR una terapia segura?

El EMDR cuenta con un amplio reconocimiento internacional. Está avalado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la American Psychological Association (APA) y múltiples asociaciones de psicología clínica en Europa.

Sin embargo, como ocurre con cualquier terapia, la seguridad depende de la formación del profesional. El EMDR requiere una preparación específica y acreditada, no basta con aplicar técnicas de manera aislada.

Es importante que la persona que lo recibe sepa que está en manos de un psicólogo colegiado, con formación universitaria y acreditación oficial en EMDR. Solo así se garantiza un proceso terapéutico serio y adaptado a las necesidades de cada paciente.

¿Quién puede beneficiarse del EMDR?

Aunque el EMDR está especialmente indicado para el trauma, también se utiliza con buenos resultados en otras dificultades emocionales. Personas que arrastran miedos intensos, bloqueos, recuerdos intrusivos o síntomas de ansiedad pueden beneficiarse de este enfoque.

No se trata únicamente de “olvidar el pasado”, sino de integrarlo. El objetivo es que la experiencia deje de condicionar el presente y permita vivir con mayor libertad y confianza.

Conclusión

El trauma no tiene por qué seguir marcando la vida de una persona. Aunque los recuerdos no se puedan borrar, sí es posible transformarlos para que dejen de doler como antes. El EMDR es una terapia eficaz y respaldada científicamente que ayuda a que el cerebro haga lo que mejor sabe hacer: sanar y reorganizar la experiencia.

Cada historia es única, y cada proceso terapéutico debe adaptarse a las necesidades de la persona. Lo importante es saber que existe una herramienta eficaz, capaz de transformar heridas invisibles en cicatrices que ya no duelen.

En InTerapia contamos con psicólogos formados en EMDR y acreditados oficialmente. Nuestro equipo ofrece un espacio seguro y profesional para abordar experiencias traumáticas y acompañarte en el proceso de recuperación.

Contacta con nosotros en InTerapia y agenda tu primera sesión. Da el paso hacia un proceso terapéutico seguro, avalado científicamente y adaptado a tus necesidades emocionales.


ARTÍCULOS RELACIONADOS  →

Zona de cobertura

Psicologos Tarragona
Psicologos Reus
Psicologos Cambrils
Psicologos Valls
Psicologos Vila-Seca

Nuestro Centro

Calle Joaquim Santasusagna, 18,
Reus (Tarragona).
Código postal: 43201

Horario

Lunes – Viernes
09:00 – 22:00
Sábados: 10:00 a 14:00

Contáctanos

686 672 462
689 968 360
Email: info@interapia.es